Detalló que cuando fueron a recoger sus cosas al hospital, la enfermera les dijo que David era un tipo genial.
Rachel también confirmó que su padre había estado sufriendo la enfermedad de Alzheimer y pasó dos semanas en un hospital de Londres con COVID-19.
Recordó que por su gran estatura y porte su padre parecía bastante aterrador, pero como persona era un hombre dulce, amable y generoso: “Realmente era un gigante gentil. Y para nosotros era nuestro padre».