Accedió a compartir sus números del token, pues los defraudadores tenían su usuario y contraseña, lo cual le dio confianza para entregar la clave, ante lo cual su banco, Scotiabank se deslindó cuando denunció el hecho.
A diferencia de otros casos, en esta ocasión los operadores del fraude contaban con el usuario y contraseña del cliente y, a partir de engaños, lograron obtener su token dinámico.
Las autoridades investigan el caso y los recursos no fueron recuperados.